Prevenir el estrés posvacacional con buenos hábitos durante todo el año

El estrés o la depresión “postvacacional” es un fenómeno muy común al acabar el periodo vacacional. Terminan las vacaciones, vuelve la rutina del día a día, la vida laboral o la vuelta a las clases. Para que este regreso sea lo más llevadero posible, hay algunos consejos de los psicólogos, que se resumen básicamente en dos conceptos: Gestionar bien las vacaciones, y prevenir el estrés durante todo el año. Si la alteración del estado anímico, conocido como “síndrome posvacacional” se mantiene durante un tiempo prolongado, conviene buscar ayuda profesional, porque puede venir causado por un trastorno emocional más de base, comenta la doctora Beatriz González, psicóloga del Hospital Parque Llevant.
 
 

Casi todos conocemos la sensación de pereza que produce el regreso de las vacaciones, restablecer rutinas, volver al trabajo o a la escuela. Después de pasar un tiempo sin horarios ni preocupaciones, cuesta volver a acostumbrarse al día a día. Este cuadro adaptativo, popularmente conocido como “síndrome del estrés posvacacional”, se manifiesta mediante un estado de irritabilidad, frustración, “y en general con un estado de síntomas mixtos de ansiedad y bajo estado anímico”, según la doctora Beatriz González, psicóloga en el servicio de psicología del Hospital Parque Llevant en Porto Cristo.
 

“Estas alteraciones del estado anímico suelen desaparecer después de pocas semanas”, y, sobre todo, normalmente se pueden prevenir. La psicóloga recomienda “volver a establecer las rutinas de horarios, alimentación y sueño ya en los últimos días de vacaciones”, así la adaptación al día a día se hace más llevadera.

Gestionar bien las vacaciones
La experiencia ha demostrado que el estrés postvacacional depende de muchos factores, pero sobre todo de la sensación de no haber aprovechado bien las vacaciones para lo que son: Un descanso. Las personas que hayan descansado lo suficiente durante sus vacaciones para reponerse y desconectar son menos susceptibles de sufrir un cuadro adaptativo después de las vacaciones. Lógicamente, esto también tiene que ver con la situación cotidiana de las personas y si por ejemplo están bien en su situación laboral. “Si no estás a gusto con los horarios, las responsabilidades, el salario o los compañeros de trabajo, está claro que la vuelta de las vacaciones puede traer malestar”, observa Beatriz González.

“El estrés se ha normalizado”
Hay un factor esencial que detectan los psicólogos en relación con el estrés postvacacional: La falta de prevención en el día a día. La mayoría de las personas, hoy en día sufren unos niveles muy elevados de estrés en su vida diaria. “Se ha normalizado el estrés, y esto es un gran problema”. La mejor prevención para no sufrir un bajón anímico al regreso de las vacaciones, por tanto, es “estar bien y equilibrado en nuestro día a día”, con unos ritmos saludables, actividades físicas, alimentación sana y organización. Según ha observado González, “ver a las personas que necesitan las vacaciones como agua de mayo, que llegan al inicio de estas ya con un gran esfuerzo, es muy sintomático”.

Esto es una clara señal que es recomendable buscar la ayuda de un profesional. “Cuando identificas que no estás bien y tienes problemas para gestionarte, es hora de ir a un psicólogo”. Esta sensación de malestar muchas veces viene acompañada por molestias de carácter físico, como dolores de cabeza, problemas con la piel o digestivos. Los profesionales de todos los servicios del Hospital Parque Llevant colaboran estrechamente para manejar estos casos desde una perspectiva integradora. La psicóloga constata que al servicio de psicología del Hospital Parque Llevant llegan muchos pacientes con un “nivel de colapso muy alto” lo que puede desencadenar en una depresión reactiva por estrés. “Vivimos en un mundo muy cortoplacista, con el estrés y el correr sin parar, mucha gente no se cuida en el día a día. El final de las anheladas vacaciones les proporciona ansiedad. Tenemos que trabajar en prevenir esto durante todo el año”.