La sanidad privada es un complemento a la sanidad pública

Dr. José David García Delgado, Gerente de Hospital Parque Tenerife

 

Entrevista al Dr. José David García, Gerente de Hospital Parque Tenerife donde nos habla de la situación actual del sector en Tribuna de Canarias en el especial "Medicina y Sanidad".

 

Hace un año la situación era totalmente diferente, no éramos conscientes de lo que nos venía. ¿Cómo ha sido la gestión de esta pandemia en un centro privado de referencia en Canarias?

La gestión fue muy dura y difícil. Efectivamente, en febrero del año pasado, nada hacía sospechar la situación que vivíamos pocos días después. Días antes del 14 de marzo, cuando se declaró el estado de alarma, la situación ya empezaba a complicarse en hospitales públicos. Desde ese momento la verdad es que la relación entre hospitales públicos y privados, bajo el paraguas de la dirección de área del Servicio Canario de Salud fue bastante fluida, tuvimos bastantes conversaciones y llegamos a acuerdos rápido para hacer frente a lo que posiblemente se nos podía venir encima. El gran problema para nosotros surge a partir del 14 de marzo, momento en el que efectivamente se suspende toda la actividad programada, no oncológica y no urgente, y mantenemos toda la dotación del hospital reforzando en determinadas áreas, como puede ser urgencias o limpieza, para hacer frente a lo que podía venir, o bien directamente o bien derivado del servicio público a través de los acuerdos que veníamos manteniendo con el SCS. Ver pasar días y semanas sin que haya prácticamente actividad, sino actividad de urgencia mínima, fue realmente duro y complicado. En aquel momento la colaboración con el SCS se centró en aceptar pacientes críticos, pacientes UVI no covid, para poder liberar los servicios. En ese sentido estamos muy contentos de poder ayudar y sacar adelante a pacientes críticos muy complicados que dada la situación pudimos sacarla adelante. Cuando pasó esa situación y volvimos a arrancar intentamos alcanzar poco a poco un nivel de actividad normal, algo que no fue fácil, entre otras cosas porque la gente no estaba por la labor de acudir a los programas de salud, y también porque nosotros adoptamos una serie de medidas para evitar que hubiera un cúmulo de gente importante dentro del hospital, manteniendo las recomendaciones de distanciamiento que se venían haciendo. De hecho hemos pasado por una auditoría para obtener un sello covid free, una auditoria muy completa y muy complicada de llevar a cabo pero que entendíamos que era fundamental para poder prestar el servicio que veníamos prestando, con totales garantías de seguridad. Gracias a esas medidas que se tomaron, a esa labor de todos los profesionales del hospital que han mantenido escrupulosamente todos los procedimientos y protocolos, y también con algo de suerte, no hemos tenido ningún brote dentro del hospital, algo que a fecha de hoy nos congratula.

 

Fue un momento decisivo en el cual la sanidad privada se puso totalmente a disposición y en colaboración con la sanidad pública. Me atrevo a decir que es un punto de inflexión donde se ve de verdad que la sanidad privada en Canarias está al servicio de los ciudadanos; creo que a todo el mundo le ha cambiado un poquito la visión de aquellos que miraban con recelo la sanidad privada, ¿no cree?

Eso es algo que yo siempre he defendido y que siempre he creído firmemente. Creo que la sanidad privada es un complemento a la sanidad pública pero que ambas tienen una razón de ser fundamental y que prestan un servicio básico para la sociedad canaria. En ese momento efectivamente se puso más de manifiesto porque existía una posible necesidad que el servicio público no podía asumir al completo, para eso existía el colchón de la sanidad privada. Creo que incluso se nos “utilizó” poco, había una serie de recursos a disposición, que podían haber permitido una mejor transición en la asistencia sanitaria de esos pacientes. Bien es cierto que en la hospitalización convencional de hospitales públicos no hubo una sobre carga importante, puesto que también la actividad programada disminuyó durante ese periodo de tiempo en los hospitales públicos, y sólo hubo problemas en la UVI, donde pudimos ayudarles. Conforme ha ido avanzando la pandemia, ha habido brotes en residencias y en otros sitios para los cuales se ha utilizado también la sanidad privada, insisto en que creo que se podía haber utilizado bastante más durante todo este periodo de tiempo. Una vez pasada esta situación seguimos estando ahí, ahora mismo estamos en una situación en la que todo esta disminución de actividad programada en la sanidad pública y en la privada ha hecho que muy probablemente las listas de espera empiecen aumentar; ahí estamos nosotros también para poder sacar adelante esas listas de espera.

 

Hablaba de que las personas tenían un poco de miedo de seguir con sus actividades rutinarias que tienen en las clínicas privadas. Hay que mandar un mensaje de tranquilidad, porque además este centro es totalmente seguro para seguir viniendo, además de necesario. ¿Qué opina usted?

Sí, totalmente de acuerdo. Por un lado, se han adoptado las medidas necesarias para que el paciente que venga al hospital venga en condiciones de seguridad óptimas, desde la creación de nuevos espacios de salas de espera, la ampliación del número de consultas para disminuir las personas que vienen y que no se den acumulaciones, o las disminuciones de personas por agenda. Se han tomado un sinfín de medidas en cuanto a protocolos de limpieza, de circulación de personas que dan esa seguridad. No sólo eso, sino que no venir cuando realmente tendríamos que venir puede provocar que cuando el paciente venga tenga ya una situación complicada. El número de urgencias ha bajado muchísimo durante este periodo de tiempo, sin embargo el número de pacientes críticos que ha ingresado en el hospital se ha incrementado. Entendemos que puede que no sea casualidad, sino una situación derivada de que el paciente espera a venir a urgencias hasta que su situación de salud se hace crítica. También tenemos que entender y animar a la gente a que, con la mesura y la prudencia que se merece esta situación en la que estamos, acudan a los centros cuando tengan una situación clínica determinada.

 

¿A día de hoy tenemos prácticamente todos los servicios en Hospital Parque totalmente reactivados?

Desde mayo del 2020 absolutamente todos los servicios del hospital se pusieron en marcha. Durante marzo, abril y mayo consultas externas cerraron y algunas actividades de diagnóstico también, pero a partir de mayo del 2020 toda la actividad se ha mantenido en condiciones normales salvo esos ajustes en agenda que comentaba ya que hemos disminuido el número de pacientes por agenda.

 

El año pasado hablábamos de que estaban en pleno proceso de mejorar o alcanzar la excelencia en ciertos servicios y especialidades. ¿Cómo ha ido todo ese trabajo de mejora interna para seguir ofreciendo a los pacientes los mejores tratamientos y avances en medicina?

La pandemia no sólo ha provocado un problema de salud, sino que también ha provocado un problema en que los proyectos que se pusieron en marcha en 2020. Sí que estamos contentos con algunos servicios que se pusieron en marcha, como la sala de hemodinámica, que ha ido cogiendo ritmo y ahora mismo estamos dando todos los servicios de cardiología, y con una actividad relativamente buena la cual nos hace estar cómodos para seguir avanzando en esa línea. Hemos planteado nuevas mejoras en otros servicios y estamos trabajando para aplicarlas, no hemos parado. Estamos atendiendo tanto al paciente covid y a lo derivado de la pandemia, pero también queremos seguir avanzando e intentar mejorar para cuando la situación vuelva a la normalidad.

 

Ahora que se empieza a divisar una luz al final del túnel, ¿cuáles son las expectativas de Hospitales Parque? ¿Senda de crecimiento y mejora?

Con respecto a Hospital Parque Tenerife, tenemos proyectos que están pendientes de las correspondientes licencias para poder mejorar la estructura del hospital. Mejoraremos el área de radiodiagnóstico y de urgencias, y simplemente estamos con trámites administrativos con el ayuntamiento para poderlos llevar a cabo. En lo que es Hospitales Parque como grupo, la intención es seguir creciendo y entendemos que, si bien ha sido un problema para los hospitales privados esta situación, también es un momento para apostar por seguir creciendo y no abandonar la línea que ya se preveía antes de esta situación. En ese sentido queremos seguir creciendo y seguir avanzando.

 

¿Para Hospitales Parque el cuidado de su personal y el mimo es una prioridad?

La gestión de la incertidumbre es complicada en momentos en los que nadie sabíamos cómo se estaba comportando la pandemia, cómo evolucionaba, que medidas eran las adecuadas, venían informaciones diferentes en función del momento o del interlocutor. Esa situación crea en el personal que está en primera línea una incertidumbre importante. Nuestro cometido era darles tranquilidad y darles la certeza de que todo lo que se hacía era bajo los criterios que marcaba el Ministerio por un lado y lo científicos que venían arrojándose conforme iba avanzando. Es verdad que la comunicación con los trabajadores ha sido fluida a lo largo de todo este periodo de tiempo, se les ha trasladado la situación del hospital, de la pandemia, de cómo teníamos que afrontar esa situación desde todos os puntos de vista, se le dieron las herramientas y eso fue dando tranquilidad a lo largo del tiempo. Ahora estamos sumidos en la vacunación que ha generado controversia porque se ha dejado en segundo lugar al personal de la sanidad privada. Todo esto hemos tenido que gestionarlo, hemos tenido que adelantar la vacunación.